miércoles, 30 de octubre de 2013

EL GUARDIÁN DE LOS SUEÑOS

Para E y J que siempre han salvaguardado mis sueños, también para Pk

CAPÍTULO I
ROSTRO DE HADA ... BOCA DE BRUJA


Autora: Elizabeth Segoviano coopyright 2013 TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
El viento no tiene dueño, ni domador, el viento va, viene, hace y deshace a voluntad. Y no le gusta que nadie intente ser su amo y señor ... esto lo saben todos los seres mágicos, y también lo sabía Darkleryth, una joven hada que aún estaba aprendiendo a ser un hada; aún así , ella se internó en las nubes y batiendo sus alas con movimientos mágicos que las hacían cambiar de color, intentó hipnotizar al viento para domarlo y así cabalgar por el mundo entero ... por algunos segundos las ráfagas de viento rodearon a Darkleryth atraídas por su bello resplandor, pero al acercarse al hada se escucharon con claridad sus encantados susurros “¡ventus, ventus, animae ventus, accedere, adducere adequitare!” aquellas órdenes de pertenecer al hada enfurecieron al viento, en cuestión de segundos el cielo entero se pobló de negras nubes cargadas de lluvia que rugían, y centelleaban haciendo temblar el suelo,  la brisa antes suave y juguetona se tornó en un vendaval que arrebataba todo lo que encontraba a su paso ... incluyendo a Darkleryth, quien intentaba en vano pronunciar alguna palabra mágica que calmara al viento, pues cuando intentaba hablar, un montón de hojas y ramas entraban en su boca, y al cabo de varios minutos de intentar escapar de aquella tormenta sus alas empapadas ya no pudieron volar y quedó a merced del viento, Darkleryth no era más que un guiñapo en las garras del ventarrón y fue revolcada y azotada entre el lodo y la hojarasca hasta que el viento se aburrió y la dejó embadurnada en una ventana, justo como si fuera un molesto mosquito.
Darkleryth estaba exhausta, la llovizna remanente de la tormenta la cubría por completo y solo pudo cerrar los ojos y soñar que estaba volando en algún otro lugar.

                                                              ***
Un suave golpeteo en el cristal comenzaba a despertar a Darkleryth, así como entre sueños el hada sintió el cálido toque de unas manos y el tenue brillo de la luz hizo que abriera los ojos, al hacerlo el hada notó que no soñaba, porque de hacerlo entonces estaba en una pesadilla, pues una pequeña humana la tenía entre sus manos. El corazón de Darkleryth latía tan fuerte que no podía escuchar nada más, en un segundo se le vinieron a la mente todas las historias que había escuchado de los trolls en las que hablaban de lo malévolos y perversos que podían ser los humanos. El hada pensó que la pequeña humana la encerraría en una jaula y le cortaría las alas para hacerla cantar día y noche, o que la haría pedacitos para verla por un microscopio, o quizá la disecaría y la sujetaría con alfileres colgándola en un cuadro ... o tal vez la echaría a una cacerola con agua hirviendo y haría una sopa. El miedo se apoderó de Darkleryth ¡quería desaparecer! Pero sus alas seguían empapadas y pensó que podía hacerle creer a la humana que todo era un sueño, el hada se paró muy derechita, sonrió, dejó que la pequeña se acercara y entonces dijo : “¡Advere somnious, effugiare somnious ... advere obscuritate!” Luego Darkleryth sacudió los dedos y salió una chispa que se posó sobre los ojos de la niña, y después ... no pasó absolutamente nada, así que la terca hada repitió “Advere somnius, effugiare somnius, advere obscuritate! ¡Advere somnius, effugiare somnius, advere obscuritate! De nueva cuenta no pasó nada, la niña tan solo sonrió y sacó un suave pañuelo de algodón, con él secó gentilmente al hada, luego cepilló su cabello, lo trenzó y sacando un cofre de madera le entregó a Darkleryth una linda capa tejida que pertenecía a una de sus muñecas, y todo lo hizo en completo y absoluto silencio, pero sin dejar de sonreír.

Darkleryth estaba sorprendida, quizá no todos los humanos eran tan crueles y perversos como decían los trolls ... tal vez los humanos pequeños aún poseían alguna bondad en sus corazones, pero los pensamientos de Darkleryth se vieron interrumpidos por el rechinar de la puerta en la habitación, de inmediato la niña ocultó al hada detrás de una pila de libros y  Darkleryth escuchó entonces una voz clara y tierna que le pedía a la niña que se pusiera su pijama y se alistara para dormir, luego ... silencio y el sonido inconfundible de un beso en la frente o quizá en la mejilla, y otra vez el rechinar de la puerta.
La niña movió los libros y el hada vió que tenía en las manos una enorme taza de chocolate caliente y espumoso rociado con un poco de fragante canela en polvo, la boca se hizo agua y la niña llenó la cucharilla con chocolate, lo enfrió un poco y le ofreció al hada, quien de inmediato comenzó a beber gustosamente.
Mientras Darkleryth daba grandes y sonoros sorbos al chocolate, la niña tomó un libro de la repisa, lo abrió y se lo mostró, en las páginas había un hermoso dibujo de un bosque lleno de hadas, lo señalaba y luego a Darkleryth.
En ese momento el hada se percató de que la niña no podía hablar, pero su mirada y su rostro eran tan expresivos que realmente no necesitaba hacerlo, así que le confesó a la niña que en efecto, ella era un hada igual a las de su libro. La pequeña sonrió sacando una hoja de papel y lapiz, Darkleryth se acercó y leyó “vuelve cuando quieras, siempre tenemos chocolate”
Luego la pequeña apagó la luz y se recostó sonriéndole al hada mientras el sueño comenzaba a vencerla , Darkleryth también sonrió y notó que sobre la puerta de la habitación estaba un bello cartel con flores que decía SOLEIL.
Gracias Soleil, susurró el hada mientras sobrevolaba su almohada y repetía el hechizo que ella estaba segura le daría sueños placenteros y llenos de fantasías a la niña hasta que se hiciera mayor : ¡Advere somnius, effugiare somnius, advere obscuritate Soleil! Y salió volando por la ventana lista para seguir su viaje y sus aventuras.


Sin embargo tan pronto como Darkleryth dejó a la niña, unas extrañas sombras que parecían provenir de las nubes comenzaron a meterse en la habitación de Soleil, algunas eran más oscuras y más grandes que otras, pero todas parecían buscar ávidamente a la niña. Esas sombras poblaron sus sueños convirtiéndolos en pesadillas, los más profundos miedos de Soleil la acecharon en un profundo sueño que parecía interminable ... dicen que para despertar uno debe gritar, pero Soleil no podía gritar.
Afuera el viento observaba intranquilo, sabía que esa hada no actuaba como tal, esa criatura tenía el rostro de un hada, pero la boca de una bruja, y había puesto un maleficio sobre la pequeña  Soleil.

CONTINUARÁ ... ;)

sábado, 26 de octubre de 2013

PRÓXIMAMENTE ... EL GUARDIÀN DELOS SUEÑOS

Soñadores, hace algunos meses puse una historia en capítulos titulada EL SELLO DE LYRAX que pueden leer aquí mismo, a raíz de esa historia he recibido muchos correos con peticiones de una nueva historia de aventuras y misterio, así que cada viernes les voy a entregar un capítulo de mi nueva historia titulada EL GUARDIÁN DE LOS SUEÑOS espero que la disfruten
xoxo Eliz, aspirante a escritora, brujita soñadora :D


Los sueños son algo sagrado, uno siempre debe protegerlos ... ¿pero  que pasaría si nuestros sueños cayeran bajo el hechizo de un hada maléfica? ¿quién podría ayudarnos? ¿acaso debemos pelear solos?
Descubre que es lo que pasa con los sueños de Soleil y porque se han convertido en pesadillas de las que no puede escapar, descubre quien es el guardián de los sueños y todas las batallas que debe librar.
ESTRENANDO ESTA NUEVA AVENTURA EL DÍA DE BRUJAS, PORQUE USTEDES LO PIDIERON, EL GUARDIÁN DE LOS SUEÑOS ¡YA VIENE!

viernes, 18 de octubre de 2013

BRUJA TURBO


Soñadores, lo prometido es deuda, y aquí les dejo la rima de brujas para los pequeños que  tanto me pidieron, espero les guste :) xoxo, Eliz
BRUJA TURBO
Este dibujo lo hice yo :P

©copyright Elizabeth Segoviano 2013
Existe en algún lugar una bruja peculiar.
No tiene la piel verde ni la nariz cubierta con verrugas color lombriz.
Vuela en escoba turbo, toda cromada, hecha a su gusto, muy bien encerada.
También tiene esta bruja un gato negro, uno blanco y uno marrón.
Y hasta un sapo cachetón.
Esta bruja rara, excéntrica, única y peculiar es una gran bruja ¡y te puede hechizar!
Convertirte en oso peludo o en un esponjoso pingüino polar.
Puede hacer que te quedes calvo o sin dientes y dejarte maloliente … si es que no has sido muy obediente.
Pero hay algo que esta bruja no puede hacer …
No soporta mezclar asquerosos brebajes como los que llevan ojos de ciempiés, verrugas de sapo, orejas de murciélago y lenguas de pato turulato.
Nuestra bruja peculiar prefiere usar ingredientes verdes, muy frescos y crocantes, dedos de rábano y pelos de maíz, son mejores para hacer a esta bruja feliz.
En su caldero hierven polvos de cúrcuma y comino, nada de uñas de lagarto ni bigotes de gato.
Sus hechizos sirven para encontrar objetos perdidos y amigos sinceros que te hagan sonreír.
Sus coloridas pócimas son de frambuesa, naranja y cerveza de raíz.
Porque esta bruja peculiar, nada normal, algo loquita que gusta de montar escobas motorizadas tiene un corazón como de alcachofa y no soporta ver a nadie llorar.
También es vegetariana y nada haragana.
Le gusta cantar y hechizar a todos los que son buenos para que puedan soñar.
Si oyes su escoba surcar el cielo con un montón de gatitos callejeros puedes mandarle un beso o hacerle un guiño y te hará soñar los sueños más locos que hayas tenido, aunque todos serán muy entretenidos.
Bruja turbo, le dicen los niños, pues siempre va a toda velocidad.
En noche de brujas quizá no la veas pasar, pero escucharás el motor de su escoba y sabrás que alguien volando en el cielo te quiere hechizar.
Con brebajes de frutas o moras y hechizos sinceros, blancos y buenos para que siempre puedas encontrar amigos de verdad.

lunes, 14 de octubre de 2013

CUENTOS EMPOLVADOS: NOCHE DE LUNA ROJA



NOCHE DE LUNA ROJA
Autora: Elizabeth Sogoviano ©copyright 2012

Es noche de brujas, esta noche como ninguna otra, merece contar una buena historia, como la que ocurrió la última vez que la luna se tornó roja ... 

El viento lo predijo con sus precavidos susurros y desesperados aullidos, lo habían avisado los inmensos nubarrones negros que se posaron sobre la ciudad cargados de relámpagos y truenos ... incluso se podían leer las advertencias en el fondo de las tazas de café, flotaban en el aromático vapor de las hojas de infusiones y se hacían más que evidentes en las barajas del tarot ... pero todas las señales fueron ignoradas, y cuando eso sucede, el destino se torna implacable y busca cumplir a como de lugar la ley más importante de la magia “TODO EL BIEN Y TODO EL MAL QUE HAGAS REGRESERÁ A TI POR TRIPLICADO”.
La suerte de cientos de magos y brujas que habían sido malvados ya estaba echada, y no había conjuro o poción alguna que pudiera salvarlos ... así debía ser, estaba escrito, y era lo justo. Pues por largo tiempo aquellos hechiceros habían abusado de su poder, y era hora de que pagaran por sus descuidos y prepotencia.

Todo había empezado la mañana del día de brujas, cuando los aquelarres se adentraron en el corazón del bosque para comenzar los preparativos de su gran celebración; por doquier se veían a brujas y magos por igual adornando las ramas de los altos árboles con faroles de vistoso papel y los senderos hacia la gran fogata estaban delineados con hermosas calabazas talladas.

En otra parte del bosque ya comenzaban a hervir los negros calderos de vino rojo endulzado con miel y aderezado con canela cardamomo y bayas de todos los colores, algunos magos llegaban ya con crujiente pan recién horneado y otras tantas brujas llegaban a vuelo de escoba con bellos canastos de frutas y toda clase de platillos deliciosos.
Pero en el rincón más alejado del bosque yacían en jaulas todos los animales que usaban los hechiceros para sus encantamientos.

Había un hermoso cuervo de un raro plumaje azulado, cuya jaula era tan pequeñita que nunca podía extender sus alas,y como sus plumas eran tan mágicas ya sólo tenía unas cuantas, pues el mago que lo capturó se las había arrancado casi por completo.
En otra jaula ya desvencijada estaba un sapo grande y cachetón que tenía demasiado calor, pues la dueña olvidó ponerle agua, y el sapo estaba a punto de llorar de sed.
Junto al sapo estaba un conejito blanco, esponjado y temeroso que se sobresaltaba con el menor ruido y sujetaba sus orejitas susurrando ¡uy que miedo! Y es que el mago que lo poseía le encantaba hacer el truco del conejo en el sombrero, pero siempre sacaba al animalito por las orejas y lo mostraba a una multitud que gritaba para luego ser empujado en esa jaulita en la cual no podía correr y ya había olvidado como se sentía recostarse en el pasto o cavar un agujero en la tierra ... también había serpientes, tarántulas y por supuesto muchos gatitos negros que ansiaban ser acariciados y acurrucarse en el regazo de alguna bruja buena, pero en cambio estaban en esas incómodas jaulas por horas y horas, solos sin nadie con quien hablar y cada luna llena les cortaban los bigotes o los hacían salir a espantar tan sólo para que alguna persona malhumorada les aventara un zapato.
Entre aquellas criaturas también se encontraba un grandioso buho blanco cuya cara semejaba a una luna llena, sin embargo, aquel no era un buho común y corriente él era el gran Lebenlicht, un mago de antiguo linaje y alto rango que había querido convertirse en buho para volar libre por el mundo y aprender el lenguaje de la luna, para ser el confidente del viento y conocer el nombre y la historia de los árboles y las plantas; pero antes de que pudiera terminar su primer vuelo fue capturado, enjaulado y despojado de su mágico plumaje, por ello no podía convertirse de nuevo en ser humano.

Pero a pesar de todo el gran mago Lebenlicht se alegraba de haber sido capturado, porque el destino lo llevó hasta allí para que ayudara a esos animalitos que no podían defenderse solos.
El mago sabía que en un día tan especial como el halloween la magia sería mucho más intensa y retornaria con el doble de poder para hacer justicia.
-            Hermanos queridos –decía el mago- estén tranquilos, los días de encierro, tristeza, maltrato y miedo se han terminado ...
-            un buho –interrumpió el cuervo- por más lindo que sea no puede ayudarnos, estas enjaulado igual que nosotros, a ti también te han cortado el plumaje de las alas ... tu alma también fue encerrada, y el brillo que aún poseen tus ojos se desvanecerá rápidamente, no hay nada que puedas hacer.
-            El destino –replicó el mago- se ha encargado de traerme hasta ustedes en este portentoso día, y no soy solamente un buho, soy un mago ... 
-            ¡Uy que miedo! –decía tembloroso el conejito en su jaula mientras sujetaba sus orejas con todas sus fuerzas-
-            ¡Por favor no teman! No todos los magos somos iguales.
-            ¡Croac, mentira! –respondió el sapo- todo lo que los magos y las brujas quieren ... croac... es aprovecharse de nosotros ...croac ... a ustedes no les importamos ... croac ... abusan  de nosotros ... croac ... no les basta con maltratarnos ... croac... tambien nos quitan nuestra libertad ... croac solo para cumplir sus caprichos y hacer su magia egoísta... croac.
-            Tienes toda la razón querido sapo ...
Cuando los animales escucharon aquellas palabras salir de los labios del mago se quedaron perplejos, nunca antes habían escuchado a ningún hechicero aceptar los crueles actos que cometían; entonces supieron que aquel mago hablaba con la verdad, supieron que podían confiar en el y creer sus palabras.
-            yo, el mago Lebenlicht, portador de la promesa del sol y de las tradiciones de la luna, les prometo que no volverán a sufrir, los protegeré no solamente con mis palabras, mi magia, y mis actos, sino con mi vida, pues ante los ojos de las estrellas todos los seres vivientes somos hermanos, todos portadores de las semillas del universo y por ende somos iguales ... y esta noche, la noche más mágica y excelsa del año, la magia actuará a su servicio. Esta noche es su noche.

Entonces, los animales, más tranquilos y convencidos de que aquel mago los ayudaría siguieron sus instrucciones al pie de la letra y esperaron pacientemente a que el sol se ocultara en el horizonte para que los hechiceros comenzaran sus festejos, así, justo cuando magos y brujas se encontraban rodeando la gran fogata que iluminaba el bosque los animalitos desde sus jaulas comenzaron a decir su encantamiento:
“Magia del sol, magia de la tierra, magia que navegas en las estrellas y cabalgas en el viento, escucha la tristeza en mi voz, siente el miedo que domina mi corazón, ven y enséñale a estos hechiceros malvados su lección, tres veces tres es la regla, tres veces tres regrésales su mala intención”. 

Aquellas palabras poderosas guiadas por la magia de Lebenlicht resonaron en el bosque y el viento comenzó a soplar furioso, fuerte y cada vez más fuerte, la luna, majestuosa e inmensa que antes brillaba suavemente se tornó roja de furia en un instante e iluminó los rostros de los hechiceros mientras las ramas de los árboles crujían y sujetaban a cada mago y cada bruja que habían sido malvados y egoístas, así, ante la luna roja el mago Lebenlicht pudo por fin regresar a su forma humana, abrió las jaulas de los animalitos y señalándolos dijo: 
¡Ustedes se creen superiores porque son humanos, pero no hay nada humano en maltratar a otro ser viviente, en especial cuando no se pueden defender, no hay nada humano en ver su dolor e ignorarlo, no hay nada humano en negarles su libertad! ¡y ciertamente no hay nada mágico en ello! Se supone que somos portadores de luz, suficientemente poderosos para construir ... ¡construir! ¡no destruir! ¡se supone que somos guardianes y protectores de esta tierra y todo lo que hay en ella! ... ¡que la magia los perdone ... si es que acaso ese es su destino!

Al terminar de decir esas palabras un estruendoso relámpago cimbró la tierra y el cielo cubriendo el bosque con un resplandor cegador y donde antes estaban los hechiceros ahora solo había cientos de figuras de hechiceros hechos de caramelos de todos colores y sabores ... 

caramelos que hasta hoy en día son repartidos por cierto mago que vive tranquilo en alguna calle de alguna ciudad en la que comparte su casa con un hermoso cuervo de plumaje azulado, un sapo cachetón y un conejito que ahora vive feliz en un inmenso jardín. 

Así que estén atentos cuando esta noche salgan a pedir dulce o truco, pues tal vez estén tocando a la puerta del gran Lebenlicht, y si son buenos y son amables portadores de luz, les contará de los viajes que ha empredido como buho ... pero, mis niños, si acaso ustedes tienen el corazón oscuro y el egoísmo les suena familiar, es mejor quedarse en casa, cerrar las ventanas y no salir ... en especial si la luna se torna roja, pues uno nunca sabe el momento en el que la magia nos devuelva lo que merecemos en verdad ... 
Ahora si me disculpan, debo atender la puerta, es hora de entregar caramelos ;)